Aquí sin ti duele demasiado
no sentir tu presencia
y no poder gritártelo
porque cada ve que te vas
y dejas de mirarme mi alma se va contigo,
dejando un cuerpo sin vida, en la oscuridad,
y quiere gritar
pero no tiene voz, ni el valor y la fuerza para poder
detenerte y que de nuevo me regreses a la vida.